sábado, 25 de julio de 2015

Cien palabras ~ Base

Todas las personas empiezan por la cabeza.

Es en ese lugar dónde se encuentran todos los pensamientos; ya sea ese secreto que no puedes confesar o tu opinión acerca de lo mal que se ve tu compañero con esa túnica nueva... Y, como lo importante — sueños y ambiciones, todo lo que somos — está almacenado ahí, decimos que es nuestra base.

Honey cree que la base de una persona se encuentra en los pies, en cambio.

Parece que está un poco loca, diciendo semejantes tonterías, y nadie la puede escuchar para que esa pequeña rubita pueda decir que sólo en tus zapatos se puede ver lo mucho que has andado.

viernes, 24 de julio de 2015

Cien palabras ~ Riel

Y quiere seguir, pero es que a veces le cuesta.

Es una inocente mezcla entre ese miedo que todos tenemos a crecer con las traiciones que el castaño ha ido acumulando a sus espaldas sin querer, pero sin darse cuenta su equipaje se ha hecho más pesado de la cuenta y Álvaro se ha quedado parado en el riel a la espera de que alguien vaya a recogerlo por fin.

Nunca le ha gustado ser la damisela en apuros, pero ya no le importa demasiado.

Después de todo no queda mucho para que el tren se lo lleve por delante.

domingo, 12 de julio de 2015

Heridas de guerra vikinga

¿Recordáis que comenté en una entrada anterior que quería más Quidditch?



Seguro que no tanto como mi cansada madre, o aquellos a los que considero mis amigos más cercanos, que han gozado de la compañía de una pequeña estrella monotemática que hablaba de Quidditch cada vez que abría la boca porque tenía muchas, muchísimas ganas de experimentar cómo se jugaba a eso.

¡Y tanto que acabé experimentando cómo los verdaderos vikingos juegan a este deporte!

Empezamos nuestro primer entrenamiento el miércoles de esta misma semana, y pese a que la gente que había en aquel momento nos repitió que aquello era bastante suave para lo que están acostumbrados ellos, ¡no pude evitar emocionarme mucho y dar todo lo que pude durante nuestro primer juego de prueba!

Lo que se tradujo después en una pierna sangrante y muchas, muchas agujetas.

Durante el jueves tuvimos la suerte de hacer un entrenamiento algo más light debido a que no asistió tanta gente como se esperaba, pero de todos modos lo agradecí porque la verdad es que no andaba muy allá con tanto ejercicio físico: desde que jugaba al baloncesto cuando era más niña no estaba haciendo tanto deporte seguido, así que acostumbrarme de nuevo a un ritmo como aquel me resultó un poco duro...

Pero en resumen fue bastante divertido; la gente que está en el equipo parece ser bastante amable, lo que es un enorme punto a favor a la hora de sentirme cómoda, y aunque todavía no los conozco lo suficiente, creo que acabaremos llevándonos bien.

martes, 7 de julio de 2015

Pequeño desahogo

En ocasiones tengo la necesidad de desahogarme para sanar las heridas de mi alma.


Un poco de arte digital, ¿muy cutre?

Puede que muchos de vosotros penséis en lo contradictorias que están sonando mis palabras en este momento, pero cuando existe un tema que me hiere o me ha llegado a molestar no puedo evitar enfrentarlo de esa manera tan especial: hablando, y me siento muchísimo mejor cuando lo exteriorizo de esa manera.

Es un poco como vomitar — por desafortunada que sea la comparación — esa mala leche que algunas personas te consiguen sacar.

De hecho, me gusta hacerlo en medida de lo posible — ya que no a todo el mundo le gusta hablar, una y otra vez, sobre un mismo tema que ya tienen muy masticado — porque, de alguna forma, me ayuda a observarlo todo desde un punto de vista muy diferente al que tengo normalmente...

Siempre he pensado que es maravilloso aprender de aquellos que te rodean a la misma vez que enseñas acerca de tus propias experiencias — un poco menos directo que imponer tu propia ley, pero con una meta bastante más enriquecedora — y procuro ejercerlo, pese a que mi cabezonería en ocasiones me convierte en una Emperatriz un poco arrogante, ciertamente caprichosa y bastante dictatorial.

Pero ya no soy una niña: entiendo que hay personas que son simplemente así.

Ni pasados trágicos con padres que eran unos auténticos capullos, ni compañeros de clase dispuestos a acabar con la moral de uno... A mí esas historias ya no me sirven de excusa para que una persona se comporte de la manera que le venga en gana.

Y acerca de ese tipo de personas ya no cuestiono a aquellos que son más allegados a mí; prefiero quedarme yo con todas esas preguntas agolpadas en el pecho para contárselas a Nadie — ese amigo con el que hablo cuando estoy sola — y que él me regale un profundo silencio como respuesta porque los dos sabemos que no merecen ni una gota de nuestra saliva.



¿Por qué tanto odio cuando no he hecho absolutamente nada? 

¿Dónde ha estado mi fallo?

¿Qué tiene de malo ser una mujer?

¿Cuándo cambiaste?

¿Volverás en algún momento a ser quien solías?

lunes, 6 de julio de 2015

¡Quiero más!

¡Hoy ha sido uno de los mejores días de toda mi vida!



Y es muy complicado que yo sea capaz de hacer semejante afirmación estando con la regla porque la mayoría de personas que me leen son conscientes de lo enferma que me pongo siempre que me toca, pero es que hoy tenía que salir de casa pese a estar muriéndome porque íbamos a ver algo que prometía ser realmente impresionante.

Que ha acabado siendo una auténtica pasada, y que me tiene tan emocionada como una niña pequeña con zapatos nuevos que ha encontrado una tienda de chucherías a mitad de precio cuando ha cruzado la calle. Con la diferencia de que he encontrado algo que me gusta casi tanto como las chucherías.



Un equipo de Quidditch en Málaga.


...

Creo que no he hecho suficiente énfasis para expresar mi amor, ¿verdad que no? Permitidme que lo repita para mi propio deleite, porque en serio que estoy encantada con esto...

UN EQUIPO.

DE QUIDDITCH.

EN MÁLAGA.

Que es mi ciudad. Wow.


Lo que hace que no me arrepienta en absoluto de haber aceptado la invitación de Bossu — que, a su vez, es la hija putativa de mi pareja — para echar un ojo a esa demostración de quidditch; aunque por norma general opino que ya hubiera merecido la pena sólo por pasar un día (que han acabado siendo un montón de horas) con ella, la verdad es que el hecho de que hayamos visto algo que nos ha fascinado tanto a los tres y que ha conseguido que yo me olvide por un momento de mis dolores lo ha bordado por completo.

Todavía estoy pegando saltos de la misma alegría.

Me encanta.

domingo, 5 de julio de 2015

Cien palabras ~ Tragaluz

Es fascinante como todos pasan a prestarle atención cuando cumple dieciocho años.

Álvaro desconoce si es porque desde los trece años lleva quemando la inocencia que hay en su alma a base de desilusiones o porque las personas corrientes se ven irremediablemente atraídas por cabrones como él, como polillas que danzan alrededor de una lámpara muy brillante.

Irremediablemente le duele.

No tiene por qué — pero lo hace.

Quizás es porque anhela que llegue una persona dispuesta a abrir la ventana de ese tragaluz bajo el que está situado, ese alguien que descubra la luz dentro de sus infinitas sombras.

martes, 30 de junio de 2015

Receta para una limonada perfecta

 Unos pocos limones.
(Recuerda exprimirlos)

Cero limas, ¡es que no encontré ninguna!

Un vaso de agua, o dos... Los necesarios.

Cuanta azúcar requieras para endulzar tu vida.

Remover con ganas, ¡y a la nevera!



De esta curiosa manera tan poco convencional he procurado mantenerme fresquita esta tarde, combatiendo la asquerosa ola de pegajoso calor que parece haberse querido instalar en España y que no pretende dejarnos hasta... Hoy, según lo que decían las noticias.

Pero por mucho que ahora se despida con un hasta luego — que no creo que dure mucho, tengo la sensación de que volverá muy pronto —, ha conseguido su principal objetivo: dejarme convertida en una masa amorfa de persona a medio derretir que no es capaz de esbozar ni un solo trazo en un papel. ¡Ni uno! Porque se me queda todo pegado a las manos, o mucho peor, emborronado porque la mina de mi portaminas se niega a ser una buena chica y acaba adhiriéndose al dorso de mi mano...

Entonces es todo una macabra y cochinísima obra de arte abstracto.

Ugh.

Pero me consuela saber que mañana por la mañana vamos a hacer una escapada rápida a la playa antes de comer — ventajas de tener un novio que se lanza por la ventana y cae al mar (?) — y, una vez que la presencia del sol se haga soportable en la calle, hemos quedado para ir con Bossu y su adorable bae a una tetería que me gusta bastante... ¡Ah, que ganitas!



Suerte a todos mis acalorados buhitos. Que paséis buena noche.